Visitar Paracho conlleva la oportunidad de estar en estrecho contacto con la naturaleza. Ya el camino que el enlaza con Uruapan, de apenas 35 Km., ofrece al visitante el abundante verde de los pinos y amplios paisajes ondulados, enmarcados por el majestuoso Pico de Tancitaro a lo lejos y por el Cerro del águila al norte, a cuyos faldas se encuentra el pueblo de Paracho.
Justo donde se marca la llegada a la población se encuentra el “Parador Turístico Tata Vasco”, una extensa zona arbolada con diferentes especies que a más de dar sombra y purificar el ambiente, lo impregnan con aroma de cedro, pino y eucalipto. Una sección es de cabañas rústicas que ofrecen hospedaje confortable y a precios módicos. Al lado se encuentra una segunda, que es el “Parque Turístico y recreativo Tata Vasco”, que alberga cenadores, restaurante, baños, canchas deportivas de baloncesto, pista para ciclistas y amplísimo espacio para caminar y disfrutar el campo.

Compite en belleza con este lugar, otra que se encuentra en el extremo opuesto del pueblo, saliendo hacia Ahuiran y justo a la nueva Unidad Deportiva. Se trata de una loma a la que se puede subir en auto y en cuya cima se construyeron canchas deportivas, un cenador y una capilla. Por sí solo es un mirador excepcional con vista a los 4 puntos cardinales, aunque más accesible es la que mira al pueblo y al valle Paracho-Aranza.
No tan a la mano, y por tanto menos frecuentado pero no menos bello es el sitio del Paracho Viejo. Se trata de un lugar que fue la sede original de la población y que sus pobladores optaron por abandonar en busca de un lugar con agua. Se encuentra camino a Arato, rumbo al basurero municipal, pero aun siguiendo adelante. Hoy el lugar se ha marcado con una capilla que pretende conservar el vestigio de la fundación primitiva. De allí luce un paisaje digno de una postal. El cielo es azul y el aire transparente y frío. La zona de hecho tiene fama de ser de lo más frío en el estado de Michoacán.
Sin embargo Paracho se precia de sus artesanías más que de su entorno. Ubicado en una zona naturalmente productora de madera, Paracho ha destacado por su trabajo artístico en la elaboración de productos de maderas. Gran variedad de muebles, artículos de adorno, de escritorio, utensilios de cocina, etcétera, pero por excelencia se fabrican guitarras y otros instrumentos musicales de cuerda afines como violines, chelos, contrabajo. Así lo deja entender el monumento a la guitarra que se encuentra a la entrada del pueblo, que es una gran guitarra sobre un pedestal. Lo mismo expresa un pequeño monumento que se encuentra en la plaza frente al templo parroquial. Representa al primer obispo de Michoacán. Tata Vasco, entregándole a un lugareño, una guitarra en proceso de elaboración. Fue en efecto Don Vasco de Quiroga quien promovió en este lugar la artesanía de las guitarras. Por años, pues y centarias Paracho ha cuidado su herencia, y no solo la ha conservado sino también ha hecho progresos innovadores técnicas y materiales en su construcción. Diríase que allí todo el mundo hace guitarras pues se le encuentra en prácticamente en todos los establecimientos a lo largo de la vía principal. Solo esa y el libramiento vehicular están pavimentados; las demás solo tienen adoquín. Varios artesanos han tenido el gusto de reproducir en miniatura el taller donde construyen sus guitarras, y los exhiben en sus comercios. La venta de curiosidades se concentra en la misma calle y en la Casa del Artesano, inaugurada con ese propósito en Agosto 4 de 2007.

La organización de los artesanos también ha logrado importantes modificaciones que les han reportado beneficios en la construcción, promoción y comercialización del producto. Hay agrupaciones como el Club de Lauderos A. C., y el CIDEG (Centro de Investigación y el desarrollo de la guitarra) que han sido factor importante en la porción a través de concursos, exhibiciones, información, conciertos, etc. Ambos cuentan con Museo de la Guitarra, auditorio y despliegan actividades sobre todo los domingos, pero especialmente en la Feria Nacional de la Guitarra, que tiene lugar en el mes de agosto, primera semana. Es esta una gran fiesta que engloba concursos en diferentes categorías, exhibiciones y venta, conferencias, concursos, conciertos. Se agregan eventos festivos como desfile, reina de la feria, música de banda y castillo. Para aprovechar más la presencia de los visitantes en esta ocasión, se van agregando otros elementos como muestras gastronomitas, concurso del juguete popular, festival infantil purépecha, etc.
Grandes han sido los logros de estos eventos, mención especialmente en la conquista de mercados exteriores, no obstante en la gran competencia de los chinos.
También cabe mencionar la difusión del arte de tocar la guitarra. De entre los grupos artísticos que se han generado en la misma población tal vez uno de los notables ha sido el grupo de los Erandi de los hermanos Bautista. Un buen recuerdo auditivo de lo interesante de Paracho.
Queda todavía destacar algo típico de Paracho. Es notable cada domingo la afluencia de gente de los alrededores. De toda la meseta purhépecha acuden, con sus atuendos de colores brillantes, a vender los artículos que en sus comunidades se producen. Es por ello que en torno al templo parroquial, en las banquetas, en la plaza en el mercado aparecen vendedores de productos del campo. Sobre todo verduras y frutas, y artesanías las más variadas como sombreros, rebozos, cestos, artículos de medara y etc. Naturalmente la ocasión vale también para comprar lo que en casa necesitan. En el intercambio comercial predomina el unos del dialecto propio pero se intercala también el español. Y por momentos Paracho se convierte en la gran capital de los purépechas.
Abunda la comida típica. Aunque hay restaurantes, la gente prefiere alimentos del mercado que está aun costado del templo. Prefieren carnitas y tortillas hechas a mano. En el portal del frente se compra buen pan de maíz o trigo molidos grueso (toqueres)
Como en toda la meseta purépecha se conserva con arraigo la evangelización misionera, predomina la población católica, por eso la numerosa concurrencia a la misa del domingo, y por ello también sus fiestas, muchas se asocian con celebraciones religiosas como la Semana Santa, Navidad, la fiesta patronal (29 de Junio), el día de muertos (2 de noviembre), peregrinación del Santo Entierro del Paracho Viejo (21 de octubre), además de las fiestas de la guitarra y la participación en la fiesta cívica nacional (16 de septiembre).
Justo donde se marca la llegada a la población se encuentra el “Parador Turístico Tata Vasco”, una extensa zona arbolada con diferentes especies que a más de dar sombra y purificar el ambiente, lo impregnan con aroma de cedro, pino y eucalipto. Una sección es de cabañas rústicas que ofrecen hospedaje confortable y a precios módicos. Al lado se encuentra una segunda, que es el “Parque Turístico y recreativo Tata Vasco”, que alberga cenadores, restaurante, baños, canchas deportivas de baloncesto, pista para ciclistas y amplísimo espacio para caminar y disfrutar el campo.

Compite en belleza con este lugar, otra que se encuentra en el extremo opuesto del pueblo, saliendo hacia Ahuiran y justo a la nueva Unidad Deportiva. Se trata de una loma a la que se puede subir en auto y en cuya cima se construyeron canchas deportivas, un cenador y una capilla. Por sí solo es un mirador excepcional con vista a los 4 puntos cardinales, aunque más accesible es la que mira al pueblo y al valle Paracho-Aranza.
No tan a la mano, y por tanto menos frecuentado pero no menos bello es el sitio del Paracho Viejo. Se trata de un lugar que fue la sede original de la población y que sus pobladores optaron por abandonar en busca de un lugar con agua. Se encuentra camino a Arato, rumbo al basurero municipal, pero aun siguiendo adelante. Hoy el lugar se ha marcado con una capilla que pretende conservar el vestigio de la fundación primitiva. De allí luce un paisaje digno de una postal. El cielo es azul y el aire transparente y frío. La zona de hecho tiene fama de ser de lo más frío en el estado de Michoacán.
Sin embargo Paracho se precia de sus artesanías más que de su entorno. Ubicado en una zona naturalmente productora de madera, Paracho ha destacado por su trabajo artístico en la elaboración de productos de maderas. Gran variedad de muebles, artículos de adorno, de escritorio, utensilios de cocina, etcétera, pero por excelencia se fabrican guitarras y otros instrumentos musicales de cuerda afines como violines, chelos, contrabajo. Así lo deja entender el monumento a la guitarra que se encuentra a la entrada del pueblo, que es una gran guitarra sobre un pedestal. Lo mismo expresa un pequeño monumento que se encuentra en la plaza frente al templo parroquial. Representa al primer obispo de Michoacán. Tata Vasco, entregándole a un lugareño, una guitarra en proceso de elaboración. Fue en efecto Don Vasco de Quiroga quien promovió en este lugar la artesanía de las guitarras. Por años, pues y centarias Paracho ha cuidado su herencia, y no solo la ha conservado sino también ha hecho progresos innovadores técnicas y materiales en su construcción. Diríase que allí todo el mundo hace guitarras pues se le encuentra en prácticamente en todos los establecimientos a lo largo de la vía principal. Solo esa y el libramiento vehicular están pavimentados; las demás solo tienen adoquín. Varios artesanos han tenido el gusto de reproducir en miniatura el taller donde construyen sus guitarras, y los exhiben en sus comercios. La venta de curiosidades se concentra en la misma calle y en la Casa del Artesano, inaugurada con ese propósito en Agosto 4 de 2007.

La organización de los artesanos también ha logrado importantes modificaciones que les han reportado beneficios en la construcción, promoción y comercialización del producto. Hay agrupaciones como el Club de Lauderos A. C., y el CIDEG (Centro de Investigación y el desarrollo de la guitarra) que han sido factor importante en la porción a través de concursos, exhibiciones, información, conciertos, etc. Ambos cuentan con Museo de la Guitarra, auditorio y despliegan actividades sobre todo los domingos, pero especialmente en la Feria Nacional de la Guitarra, que tiene lugar en el mes de agosto, primera semana. Es esta una gran fiesta que engloba concursos en diferentes categorías, exhibiciones y venta, conferencias, concursos, conciertos. Se agregan eventos festivos como desfile, reina de la feria, música de banda y castillo. Para aprovechar más la presencia de los visitantes en esta ocasión, se van agregando otros elementos como muestras gastronomitas, concurso del juguete popular, festival infantil purépecha, etc.
Grandes han sido los logros de estos eventos, mención especialmente en la conquista de mercados exteriores, no obstante en la gran competencia de los chinos.
También cabe mencionar la difusión del arte de tocar la guitarra. De entre los grupos artísticos que se han generado en la misma población tal vez uno de los notables ha sido el grupo de los Erandi de los hermanos Bautista. Un buen recuerdo auditivo de lo interesante de Paracho.
Queda todavía destacar algo típico de Paracho. Es notable cada domingo la afluencia de gente de los alrededores. De toda la meseta purhépecha acuden, con sus atuendos de colores brillantes, a vender los artículos que en sus comunidades se producen. Es por ello que en torno al templo parroquial, en las banquetas, en la plaza en el mercado aparecen vendedores de productos del campo. Sobre todo verduras y frutas, y artesanías las más variadas como sombreros, rebozos, cestos, artículos de medara y etc. Naturalmente la ocasión vale también para comprar lo que en casa necesitan. En el intercambio comercial predomina el unos del dialecto propio pero se intercala también el español. Y por momentos Paracho se convierte en la gran capital de los purépechas.
Abunda la comida típica. Aunque hay restaurantes, la gente prefiere alimentos del mercado que está aun costado del templo. Prefieren carnitas y tortillas hechas a mano. En el portal del frente se compra buen pan de maíz o trigo molidos grueso (toqueres)
Como en toda la meseta purépecha se conserva con arraigo la evangelización misionera, predomina la población católica, por eso la numerosa concurrencia a la misa del domingo, y por ello también sus fiestas, muchas se asocian con celebraciones religiosas como la Semana Santa, Navidad, la fiesta patronal (29 de Junio), el día de muertos (2 de noviembre), peregrinación del Santo Entierro del Paracho Viejo (21 de octubre), además de las fiestas de la guitarra y la participación en la fiesta cívica nacional (16 de septiembre).
Conociendo Paracho, conoces mucho de Michoacán y del mundo indígena.